Seremos una generación sorda

Los audífonos se han convertido para algunas personas en un accesorio más del diario vestir, pues los utilizan con los reproductores portátiles de audio como Ipods, mp3 y celulares.

Un auricular es un dispositivo para escuchar sonidos. En el mercado existen tres grandes grupos: Intrauricular, circumaural y supra aural. Según Jorge Valdano, otorrinolaringólogo, el problema del uso de los aparatos reproductores radica en la frecuencia e intensidad con la que se utilizan los audífonos.

“La exposición a un ruido muy alto en un plazo de seis a ocho horas ya puede afectar la audición. La persona por naturaleza va perdiendo la audición (presbiacusia), el mal uso de estos aparatos acelera el problema”, dice.

Los efectos pueden ser físicos, como dolor de cabeza, hipertensión y cansancio. Psicológicos, entre estos el estrés, irritabilidad y falta de concentración. Y por último los efectos sociales como problemas de comunicación y aislamiento. Pero sin lugar a dudas el más grave es la pérdida de audición.

Para Fernando Torres, otorrinolaringólogo, no existiría riesgo alguno si se toman precauciones con los audífonos, usando los correctos y no en volumen alto. “Utilizar audífonos de mala calidad podrían causar humedad en el oído, provocando una otitis externa”.

La Organización Mundial de la Salud aconseja no exponerse a más de 65 decibelios (unidad de referencia para medir la potencia del sonido). Para entenderlo mejor, una conversación mide cerca de 60 decibelios y el despegue de un avión 180. Sus estudios revelan que la pérdida de audición provocada por el ruido es una de las enfermedades irreversibles más frecuentes hoy en día. “Los fabricantes deben entender que están creando una generación sorda”, agrega Torres.

Eric Layser, experto de producto de la marca Sony, recalca que el uso es responsabilidad del cliente. “Actualmente, los dispositivos vienen con su software que permite establecer parámetros máximos”.

Layser reconoce que como fabricantes no se rigen a ninguna regla de decibelios permitidos. “No tenemos medida fija, buscamos siempre mayor potencia y fidelidad”.

El uso de los auriculares debe ser exclusivamente estacionario, no portarlos mientras se conduce o camina por la calle, porque la persona se aísla del ambiente, no reconozce sonidos externos y se puede ocasionar un accidente.

Supra aural
Están un poco separados del oído y dejan pasar parte del sonido externo. Son conocidos como los ‘diadema’.

Circumaurales
Aíslan la audición del sujeto e impiden que el sonido salga.

Intrauriculares
Se introducen al canal auditivo y permiten mayor movilidad. Es el de uso más común entre los usuarios.

Via: eluniverso