Escribiendo el futuro...

Saludos,

Observar al pasado y notar un abismo de recuerdos no es una buena señal. Seguir observando y notar una ausencia, lagunas de ideas, espacios en blanco, es difícil de comprender. Pero, peor aún es recordar que nunca a pasado. No es que se olvidó, es que nunca pasó. No cumpleaños, no andar en bicicleta, no conversaciones silenciosas de padre a hijo, no eventos escolares, no compartir un buen juego de pelota. Que tal no abrazar, tampoco charlar. No sentir la presencia, ni siquiera de un fantasma. Simplemente no ocurrió.

Tal ves sutilmente la vida jugó a los dados y la suerte no estuvo de nuestro lado. Pero no me puedo engañar con esa mentira. Se que simplemente es una especie de tradición familiar donde no relacionarse con los hijos es una proeza y un orgullo. Lamentablemente temo que no continuaré esta cadena. Pues la falta de cariño de sangre me ha enseñado a valorarlo, que ironía, apuesto que no sabías que me educabas sin tan siquiera intercambiar palabras. Eres un verdadero genio de educación involuntaria. 

Sigo aquí. Estoy vivo y tengo mucho que agradecerte: la vida. Vida que a veces desprecio, pero luego entiendo que elegiste la tuya y respeto tu decisión. Sabes, te perdiste 21 años de mi vida ¿Quieres seguir perdiendo más? Siempre estoy dispuesto a cambios. No es tu obligación, ni tu deber, tampoco tu derecho. Comprendo que "me quieras" y que tu forma de demostrarlo es no hacerlo. Esta en tus manos. No me llames (Si lo haces no hablaré), eso de llamadas por teléfono no funciona, prefiero por escrito. Es más personal y sencillo. No se si será la timidez o simplemente te a vergüenza, pero descuida, no estoy aquí para juzgarte. La decisión es tuya. El pasado no se puede borrar pero el futuro siempre se puede escribir...

Bendición Manuel.